Ante Perú, Colombia cedió un empate que lo compromete con miras a su clasificación directa al Mundial 2026
Por Guillo González/Kronos
El reloj marcaba la una y treinta y ocho de la tarde y la temperatura rondaba los 32 grados centígrados, cuando el bus de la selección Colombia de fútbol llegó al estadio Metropolitano Roberto Meléndez para afrontar uno de sus últimos y definitivos retos, el partido ante la selección peruana por la fecha 15 de las eliminatorias mundialistas.
Uno a uno bajaron los integrantes del equipo nacional, concentrados todos, como si tuvieran solo una sola cosa en mente: ganar. Lo jugadores calentaron, entraron en calor, probaron el ambiente en su feudo, regresaron al camerino a ponerse su indumentaria y volvieron a salir con actitud positiva, en sintonía con un público ávido de victoria.
En la cancha, Colombia tomó la manija del partido de entrada, ante un conjunto ‘Inca’ que traía la cruz de solo tener un punto como visitante en la actual eliminatoria, producto de un empate ante Paraguay, de resto, solo derrotas. Y los colombianos se hicieron sentir, con ganas de liquidar temprano el asunto.
Al minuto de juego, Muñoz dejó para Durán por derecha, centro al área y james remata con derecha pero deficiente, la pelota da un bote y queda en manos del arquero. El partido resalta por la intensidad en el medio del campo, Colombia, recuperando con ímpetu, Perú intenta emular la actitud pero con faltas.
A los 3 minutos, Garcés se lleva la tarjeta amarilla por falta descalificadora ante Durán en el centro del campo. James cobra la ofensa tirando al área, Durán cabecea y el rebote le queda a Daniel Muñoz que remata por arriba, segunda llegada en dos minutos para Colombia.
‘Cucho’ Hernández se muestra en el frente de ataque moviéndose por las bandas, Colombia ahoga a Perú, sin dejar que piensen con el balón cuando lo tienen. recuperación y salida rápida. James maneja el ritmo. A los 10 minutos sube el bloque, centro de Borja a la cabeza del Cucho pero el remate sale débil al centro y el portero controla con tranquilidad.
Unas de cal…
Los de casa lo intentan, buscan el control del esférico, con trámite en el medio por medio de los volantes, intercambiando posiciones. Muñoz llegando por derecha, en un par de ocasiones lleva peligro al área peruana, pero sin precisión. Durán, reclama precisión al lateral de la liga premier.
Las estadísticas favorecían a Colombia, 74 por ciento de posesión, a los 15 de juego. Pero un minuto después se da la primera llegada de Perú, centro de Advíncula y Mina envía al córner, ante el peligro visitante. A los 18 el mismo Advíncula estuvo cerca de convertir con un remate al borde del área que pasó por encima del arco de Mier.
A los 20 Durán acercó a Colombia a la ilusión de marcar con un tiro zurdazo enroscado que no alcanza a clavarse en el ángulo, esa estuvo cerca, el público se lamenta pero exige más. Antes de los 25 minutos de juego, Perú crece en dominio, Colombia se repliega y le cede el balón, el ritmo baja y le cuesta asegurar el control por falta de presión.
El partido se empareja. Minuto 26, centro de Arias que no alcanzan a conectar ni Durán ni Cucho, ambos caen, anticipados por los centrales de Perú. Castaño y Lerma recuperan y salen jugando, Arias intenta marcar diferencia por derecha, haciendo tándem con Muñoz para ampliar el juego.
Cerca del final del primer tiempo se dan dos situaciones para destacar. Al minuto 42, amarilla para Durán por falta innecesaria, el delantero colombiano se nota desesperado y errático, incluso, con reclamos destemplados a sus compañeros. Y cuando corrían los 44, Kevin Mier, ahogó el grito de gol de Perú al achicar eficazmente ante la llegada de Paolo Guerrero y Edison Flórez, se salva Colombia. El primer tiempo culmina y el público, en silencio despide a los suyos, esperando más para el complemento.
Segundo tiempo, cambios y ansiedad
Para la etapa complementaria, Lorenzo mueve sus fichas, de entrada Luis Javier Suárez, el samario goleador del Almería español entra en lugar de John Jader Durán, buscando efectividad en la parte de arriba. James empieza retrasado en el terreno, buscando panorama y cambios de frente.
Colombia toca con calma pero sin romper adecuadamente la muralla Inca. Los peruanos se refugian en bloque, con poca salida. A los 60 dos cambios más, entran Marino Hinestroza y Jaminton Campaz, por Juan Camilo Hernández y John Arias, esta última sustitución protestada por la tribuna. Se busca movilidad y desequilibrio.
Perú pareció mejorar con las salidas colombianas, a los 68, error de Mier en salida y remate peruano que pasa cerca, desespero en la afición.
Ríos asoma para entrar por un Lerma fundido, a los 70, el partido se torna enredado, los cambios no surten efecto y el combinado patrio parece naufragar.
Motivados por el amor propio, Colombia revive, de la mano de Campaz, Marino y James, atacando por las bandas, en una seguidilla de aproximaciones que emocionan y contagian a los hinchas deseosos de gol. Faltan 15 y urge una anotación que desahogue a la tricolor.
Con más ganas que orden Colombia se aproxima, centro de Campaz y rechazo angustioso de Zambrano, llegada con peligro, la gente se emociona. James cobra, Suárez cabecea y el balón golpea en la escuadra derecha de Gallese.
Desespero y más ganas que orden
El partido entra en su fase final y del gol colombiano nadie da razón. En el banco, en las gradas y en el terreno de juego, cunde el desespero. Los jugadores lo acusan, y no hay tranquilidad para definir, se notó en un remate de Castaño que termina por arriba, y en la jugada previa de Campaz que se equivoca al decidir no tirar y buscar a Suárez, pero en un pase comprometido.
Al final, Ríos lo intentó, Hinestroza quiso desbordar, Mina pedía de centro delantero que le llegara un balón aéreo, Campaz disparó desviado, pero nada surtió efecto, Perú impuso su férreo orden defensivo y los colombianos quedaban en deuda.
A los 96 clavados, el juez brasilero Sampayo tomó el balón, señaló el centro del terreno y determinó el final del partido, otra vez se escaparon los puntos como local, la cuestión se aprieta, el equipo colombiano, que salió chiflado por su propia afición, se estancó, tanto en resultado como en su accionar y encima, se viene Argentina.
