El poderoso mensaje de los Thunderbolts*

Kronocinéfilos es un espacio para que los amantes del cine conversemos y opinemos sobre las películas de moda, las que hicieron historia, las que nos han gustado mucho y las que no tanto y recomendemos títulos, para disfrutar como niños de la magia que produce el mundo cinematográfico.

En esta primera columna analizamos la nueva historia proveniente del universo Marvel, que se muestra como un faro de ayuda en medio de la oscuridad

Por: El Búho kronista

Si esperas encontrarte con una típica película de superhéroes te vas a llevar una sorpresa, mayúscula, bueno, al principio esa será seguramente la impresión.

Los Thunderbolts*, son todo lo contrario a lo que se espera de un superhumano que ayuda a la gente normal y la cinta en sí es un irónico retrato de los sentimientos más oscuros de la humanidad: egoísmo, desesperanza, abandono, fracaso, entre muchos otros, todo girando alrededor de personajes traumados y de pasado turbulento, cortos de espíritu y con pocas ganas de redención.

Accidentalmente se reúnen los antihéroes que luchan por salvarse de manera egoísta. Foto Archivo particular

Si, ese es el panorama inicial en un filme de formas mas bien rústicas, aunque efectivas, pero con un fondo hermosamente delineado y con un objetivo claro y conciso.

Sin ánimo de hacer spoiler, porque no es el fin que perseguimos con esta columna, solo les diré que ir a verla vale la pena. Ese objetivo, tan bien definido, que les menciono, es todo lo que está bien al final, para los que en algún momento hemos sentido el terror de la soledad.

Al principio hay poca armonía entre los protagonistas. Foto Archivo particular

El abrazo de la oscuridad

El ritmo de la película lo llevan los particulares protagonistas, como un laúd a cuestas, como si les pesara y no los dejara avanzar, pero el brillante y sorpresivo giro de uno de ellos, marca el sendero para que avance y termine dejándonos al final, una sonrisa en los labios.

La británica Florence Pugh se erige como una de los personajes principales, junto a David Harbour, su padre en la cinta (Stranger Things). Foto Archivo particular

No es fácil retratar algo tan complejo como la oscuridad humana, sin embargo, el director pone esa misión en las fallas de cada uno de los miembros de tan disímil grupo de antihéroes, logrando develar su mensaje a través suyo.

Hay una escena clave para entender lo que pretende decirnos, y una frase que retumba en el resto de la cinta…” No estás solo” … tres palabras que pueden evitar tragedias, pérdidas irreparables y cambiar el destino de muchas personas, sobre todo, cuando se dicen a tiempo.

Lewis Pullman encarna el poder de la oscuridad a través de su personaje Robert Reynolds, Sentry. Foto Archivo particular

La oscuridad suele abrazar sin aviso, sin pretensiones, solo llega y hace, y marca como el hierro al ganado, sin embargo, cuando una mano amiga, una palabra, una frase, un gesto de bondad aparece, esa penumbra se desvanece y el reinicio suele traer recompensas ante el sufrir.

Como les dije, el mensaje es claro, bien trabajado y más que oportuno en un mundo y una sociedad que sufre irreparables daños, sobre todo en nuestra niñez y juventud, tan necesitadas de guías y protección.

Sentry vuela de los comics a la pantalla con su personalidad bipolar. Foto Archivo particular

Otros valores y algo de diversión

Trabajo en equipo, liderazgo, solidaridad, apoyo…bondad y al final sacrificio, salen a flote cuando los personajes deciden asumir el reto de cambiar, de hacer algo, aún a costa de sus propias vidas y terminan regalándonos una de las mejores películas de héroes no convencionales que se haya podido rodar.

El filme tiene personajes muy humanos que buscan su propósito de vida, a pesar de sus fallas y traumas. Foto Archivo particular

En cuanto a aspectos técnicos y humanos, bueno, tiene de todo, grandes efectos, musicalización ideal, estremecedora y efectiva, un color que va de acuerdo con el aura de la película, diálogos precisos y adecuados, aunque sin muchas pretensiones, pero si buenas actuaciones y un guion que empatiza rápidamente con el espectador.

En síntesis, los Thunderbolts*, así con asterisco (debido a su inevitable cambio de nombre), no pasa inadvertida en medio del prolongado silencio de los Vengadores y durante el cual, el universo Marvel saca producciones con sus posibles reemplazos, pero se notó (y se agradece), que aprovecharon la oportunidad para impactar positivamente en temas tan sensibles como la depresión, la salud mental y la unidad familiar.

Premier de la cinta con sus protagonistas. Foto Archivo particular

Y tú, ¿Qué esperas para ir a verla?, ve a cine y me cuentas.